Una dudosa falta de Álvaro Morata contra Dumfries y un penal que se tuvo que repetir por invasión de Matthijs De Ligt cortaron la racha de la Vecchia Signora de dieciséis partidos sin perder en Serie A.
Este domingo, se disputó el Derby d'Italia entre la Juventus de Turín y el Inter de Milán en el Allianz Stadium de Turín, siendo este un partido clave para las aspiraciones de ambos equipos por lograr el Scudetto. El equipo local debía ganar todos sus partidos restantes en la Serie A y ligar un par de pinchazos de los tres equipos de arriba, mientras que los visitantes necesitaban una victoria para seguir en la lucha por el título, ya que estaban a seis puntos del Milan (aunque todavía poseen un partido pendiente).
La Juventus recuperaba a Alex Sandro y a Denis Zakaria para este partido, después de las respectivas lesiones de cada uno. Sin embargo, también contaban con la baja de Luca Pellegrini, que no vería acción gracias a una amonestación recibida en el anterior encuentro contra la Salernitana. Esto le daba más oportunidades al lateral izquierdo brasileño para decir 'presente' en el once titular.
El partido comenzó con una fuerte intensidad por parte de ambos equipos, aunque la Vecchia Signora mostró una fuerte superioridad durante los primeros veinte minutos. Lamentablemente, al minuto 34, Manuel Locatelli salió del terreno de juego en lágrimas por una herida que recibió por una fuerte patada de Lautaro Martínez. Se estima que estará fuera de las canchas por 20 días.
El Inter también buscaba crear oportunidades y, casi finalizando la primera parte, los visitantes reclamaron un penal a favor por un pisotón de Álvaro Morata sobre Denzel Dumfries, en una jugada donde Alex Sandro también estaba involucrado. Tras revisar el VAR, el árbitro decidió pitar la pena máxima en contra del equipo de Massimiliano Allegri. Wojciech Szczęsny detuvo el disparo de Hakan Çalhanoğlu. Sin embargo, se ordenó la repetición del tiro gracias a que Matthijs De Ligt entró en el área chica antes de tiempo. En esta ocasión, el jugador turco no desaprovechó su oportunidad y mandó el esférico al fondo de la red.
El segundo tiempo fue algo similar al primero, con una Juve que intentaba hacer el gol del empate, sin éxito, y un Inter que buscaba generar la mayor presión posible para mantener el resultado en la pizarra. Al ver que el gol no llegaba, el equipo transalpino comenzó a desesperarse y eso evidenció la desorganización que poseía a nivel ofensivo. Asimismo, buscaron forzar infracciones dentro del área rival y, si bien hubo algunas ocasiones en las que los nerazzurri cometieron entradas fuertes cerca de su portería, el juez principal solicitaba a los jugadores bianconeri que se pusieran de pie y siguieran jugando. esto duró hasta el minuto 90+6, cuando finalizó el choque con la primera derrota en liga por parte de la Juventus desde el 20 de noviembre del año pasado cuando, cuando cayeron en casa contra el Atalanta.
De este modo, el combinado turinés se despide de cualquier posibilidad de ganar el trofeo liguero y deberá luchar por mantenerse dentro de los cuatro primeros lugares y sellar el pase a la final de la Coppa Italia Frecciarossa en un enfrentamiento complicado contra la Fiorentina. El torneo copero es la única posibilidad para la Juve de no quedarse en blanco esta temporada.
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